martes, octubre 11, 2005

Todo lo que acaba, empieza

Tristes son las noches en que el insomnio te puede. Y tristes son las mañanas en que estas tan cansado que no puedes levantarte. Pero cuando esas noches y esas mañanas se repiten una, y otra y otra vez...dejan de ser tristes para convertirse en una rutina, una rutina que te aburre y te convierte en un peregrino vestido de gris.

Y a veces, muy pocas veces, te pones un traje blanco y sales a la calle radiante, dispuesto a cualquier cosa. Y otras, te vistes con tu traje negro, el mas serio de los tres, y paseas sin rumbo por la ciudad, poniendo mala cara a todo aquel que te encuentras a tu paso. Pero la mayoria de las veces vistes de gris, y la gente no se da cuenta de tu presencia, como si fueses una parte mas del decorado de sus vidas.

Hasta que un buen dia te decides a contarle al mundo lo que se siente, vistas lo que vistas ese dia. Blanco, gris o negro. Hola Hombre.